Los beneficios de sonreír

Las emociones y los estados de ánimo son reflejados por el individuo gracias a las expresiones corporales y a las manifestaciones somáticas, es por ello que cuando una persona se asusta, el cerebro envía esa información al cuerpo e involuntariamente los ojos se abren mucho y la persona exhala una pequeña bocanada de aire, lo mismo sucede cuando un individuo se siente triste y manifiesta síntomas de decaimiento, o inclusive, comienza a llorar.

Esto también ocurre con la sonrisa, que a su vez, es considerada uno de los gestos con mayor poder comunicativo. Básicamente, sonreír consiste en elevar los extremos de los labios hasta las mejillas para expresar una amplia gama de sentimientos, sensaciones o emociones positivas: alegría, bienestar o goce, bien sea intencional o inconscientemente.

beneficios de sonreir

Los experimentos e investigaciones que se han realizado con el objeto de estudiar las funciones y los beneficios de la sonrisa, han arrojado resultados sorprendentes, uno de ellos fue un análisis de un experimento publicado por la revista “Lifescience”, el cual demostró que los niños que sonreían con menor frecuencia o aquellos que no sonreían en absoluto, tenían cinco veces más posibilidades de divorciarse en un futuro. Asimismo, otro estudio publicado en la revista “Science Translational Medicine” demostró que la sonrisa ayuda a mantener una actitud positiva frente a los tratamientos farmacológicos, y en estas circunstancias, el fármaco logrará hacer más efecto.

Por otro lado, también existen sonrisas genuinas y falsas, y las mismas están vinculadas con dos vías nerviosas diferentes, y es que a medida que el individuo crece, los circuitos neurales se programan para que el hombre use la sonrisa falsa como mecanismo de defensa frente a situaciones que generan miedo y rabia.

Pero ¿Cómo podemos saber si una sonrisa es genuina o forzada? Es muy sencillo, solo debes mirar fijamente a la persona y te darás cuenta que cuando alguien ríe de verdad, se forman pliegues al lado de los ojos de forma involuntaria, de lo contrario, únicamente se moverán los músculos de la boca.

La sonrisa también se interpreta de acuerdo a la cultura y región. En este sentido, los estudios han comprobado que a nivel comunicativo los estadounidenses descifran la sonrisa a través de la boca, pero en Japón, los individuos tienden a hacer mayor énfasis en los ojos.

En resumen, la sonrisa se ha convertido en una de las expresiones corporales más estudiadas durante los últimos años, y gracias a esto, se ha demostrado la cantidad de beneficios físicos y psicológicos que le ofrece a los individuos en todos los ámbitos de la vida: social, laboral y familiar, funcionando de la misma manera en niños, adolescentes y adultos, por tratarse de una acción inherente del ser humano y una reacción que casi siempre está vinculada con estímulos que nos resultan agradables.

Beneficios de la sonrisa

1) Se contagia

Una de las grandes ventajas de la sonrisa es que es contagiosa. Cuando alguien sonríe, provoca emociones positivas en todas las personas que se encuentran a su alrededor, y a su vez, es un indicador de ser un individuo sociable, sensible y amable. Por lo que la sonrisa es un factor que también promueve la cercanía

Los expertos siempre colocan un ejemplo básico para comprender los niveles de contagio que posee la sonrisa, e invitan a las personas a hacer su propio experimento sonriéndole a un desconocido en la calle, asegurando que las probabilidades apuntan a que ese individuo le devuelva la sonrisa a pesar de que no lo conozca, de hecho, los expertos aseguran que al menos de la mitad de las personas les devuelven una sonrisa a un extraño.

Y más allá de los experimentos sociales, también existen explicaciones científicas que corroboran esta información, y es que esa especie de feedback  de sonrisas entre individuos, se genera por el efecto de las neuronas espejo y la reciprocidad. Cuando una persona te responde con una sonrisa, comienza un proceso interno emocional que la lleva a una zona de confort, e inconscientemente, ese individuo asociará esa sensación positiva con tu persona. Un ejemplo claro sucede con los bebés, cuando una persona le sonríe a un bebé, éste automáticamente y de forma impulsiva le devuelve la sonrisa.

Para culminar con el respaldo de la teoría que afirma que la sonrisa es contagiosa, vale agregar que un estudio realizado en la Universidad de Harvard demostró que cuando una persona era feliz, quienes lo rodean, tienen alrededor de un 25% de posibilidades de contagiarse con esa buena energía y mejorar su ánimo

2) Genera confianza

Una persona que sonríe parece ser un individuo en quien se puede confiar, y al mismo tiempo, da la impresión de ser generoso y extrovertido, razón por la cual, las personas de su entorno querrán estar cerca de él puesto que se sienten totalmente cómodas para compartirles anécdotas, secretos o inquietudes.

Con relación a este punto, se han realizado múltiples experimentos sociales, encuestas y análisis, sin embargo, fue en el 2001 cuando un grupo de expertos en Estados Unidos lograron demostrar que una persona estaba más propensa a confiar en otra, si la misma estaba sonriendo. Entendiendo que así como una sonrisa es sinónimo de amistad y sociabilidad, aquellas personas que no sonríen se muestran como individuos misteriosos, cerrados, asociales y de carácter muy denso.

3) Crea empatía

Sonreír es un recurso extraordinario para pedir perdón o excusarnos por algún mal entendido, y es que, las personas acostumbran a tratar con mayor condescendencia a aquellos que sonríen genuinamente porque lucen como individuos honestos y transparentes.

Además de esto,  la sonrisa también tiene la capacidad de disminuir la agresividad de una persona, y se entiende de algún modo como un signo de sumisión. Sonreír después de haber cometido un error consigue que se reduzca la molestia de quien se vio afectado, y lo mismo sucede en situaciones que nos causan vergüenza, varios estudios han demostrado que bajar la mirada y sonreír favorece los vínculos sociales.

Afirmamos que una sonrisa honesta crea empatía porque gracias a ella podremos conseguir la mejor actitud de otras personas en casi todos los ámbitos: social, laboral y familiar, mejorando notablemente nuestra calidad de vida. 

4) Reduce el estrés y es un fármaco natural.

Cuando una persona se encuentra presionada o en un clima de estrés, se le dificulta tener una visión más amplia de las cosas, puesto que enfocan toda su atención en el problema, dejando a un lado la posibilidad de encontrar las soluciones que se necesitan, sin embargo, sonreír ayuda a reducir los niveles de estrés y a tener mayor claridad para encontrar opciones, visto de otro modo, sonreír nos permite ser más optimistas, evaluar con mayor tranquilidad el problema y contemplar nuevas ideas.

Al mismo tiempo, sonreír expande los límites de la imaginación, y es que cuando un individuo necesita encontrar una solución debe pensar de un modo menos convencional y considerar otras opciones o ideas que antes descartaba. Esto sucede con frecuencia en el plano laboral y para reafirmar esta teoría, fue un estudio en el año 2010 realizado por un conjunto de psicólogos y médicos el que comprobó que la mayoría de los estudiantes que sonreían sacaban mejor puntuación en las asignaturas que aquellos que no lo hacían.

Por otra parte, sonreír constantemente favorece nuestra vida social, laboral y también nuestra salud. Numerosos expertos han comprobado que al sonreír, el ser humano activa determinados músculos en la cara que liberan analgésicos naturales como la endorfina y reduce la cantidad de hormonas que causan estrés como la dopamina y el cortisol. Por tanto, la medicina y la psicología consideran que sonreír es una especie de fármaco natural.

5) Incrementa el sex-appeal

Todos sabemos que muchas veces sonreír puede ser un gesto de picardía, tanto en hombres como en mujeres, de hecho, la sonrisa podría ser una potente aliada para conquistar o seducir a otra persona. Sin embargo, fue en el año 1985 cuando un grupo de psicólogos demostraron el efecto que producía la sonrisa de la mujer en el hombre más allá del contacto visual; el experimento social consistió en pedirle a una mujer que estableciera contacto visual con hombres desconocidos, consiguiendo que un 20% de los hombres la abordaran, pero cuando agregó una sonrisa, un 60% de los hombres se le acercaron. Por supuesto que debemos considerar que la sonrisa era un factor que reducía el miedo al rechazo en el hombre y esto los envalentonaba.

Con este estudio también detectaron que la sonrisa del hombre hacia la mujer no tiene un efecto tan potente, puesto que las mismas señalaron que un caballero les parecía más atractivo cuando lucía serio, orgulloso o apenado. Razón por la cual los especialistas concluyeron que cuando un hombre sonríe menos, se muestra más masculino y de esta manera puede captar la atención de más mujeres. 

Finalmente, nos encontramos con que sonreír también produce placer, aunque esto dependa directamente de quien nos sonría, sin embargo, los expertos afirman que una sonrisa sincera de otra persona por la que sentimos agrado nos puede producir una sensación de placer incluso mayor que la que se siente durante el sexo.

6) Beneficia económicamente

Un grupo de expertos querían comprobar si la sonrisa podría provocar beneficios en el ámbito económico, y fue por ello que seleccionaron como muestra a unas camareras y  demostraron que aquellas que le sonreían al cliente obtenían más propina que aquellas que no lo hacían, y es que cuando un individuo sonríe libera emociones positivas y se refleja como una persona honesta, por lo que la otra parte sentirá la necesidad de ayudar. 

7) Mejora el ánimo

Se ha comprobado científicamente que sonreír sin motivo o de mentira, permite cambiar el estado emocional del individuo y llevarlo a una zona de optimismo, esto se debe a que el cerebro y el cuerpo tienen un sistema de comunicación que conocemos como propiocepción, y esta comunicación consiste en la información que va del cerebro a los músculos, razón por la cual cuando escuchamos algo que nos causa gracia sonreímos, sin embargo, también sucede a la inversa, cuando sonreímos sin motivo alguno, el cerebro recibe esa información de los músculos y para no ser incongruente, comienza a trabajar en pro a que te sientas optimista, por ello, sonreír aunque sea de mentira te hace sentir más alegre.

Fue Charles Darwin quien comprobó esta teoría, conocida también como retroalimentación facial, y aseguró que esto podía suceder con cualquier simulación emocional que quisiéramos provocar desde nuestro cuerpo hasta nuestra mente.

Al sonreír, el cerebro entiende que el ser humano está contento y libera sustancias capaces de generar alegría, pero también sucede lo contrario, otro estudio demostró que las personas que intervienen sus rostros con sustancias como el Botox, y pierden la libertad de sonreír totalmente, tienen tendencia a la depresión.

¿Cómo sonreír más?

Como hemos podido leer, los beneficios de la sonrisa son muchos y todos muy importantes para mejorar en distintos ámbitos de la vida, y es por ello que debemos intentar incorporarla más en nuestra cotidianidad. No obstante, la psicología positiva ha estudiado maneras de convertirte en una persona más feliz motivándote a realizar las siguientes actividades:

  • Ve contenido audiovisual divertido, entiéndase películas, series o programas de televisión. La mente necesita despejarse y hacerlo con material que nos produzca buen humor. Cuando el ser humano evita ver películas depresivas o programas de televisión negativos, logra tener una visión un poco más alegre de las cosas, no obstante, permanecerá de buen humor naturalmente.
  • Comparte con tus amigos y familiares. Rodéate de personas que se sientan atraídas por la diversión y de aquellos que ven la vida de una forma optimista, estas personas lograrán sacar tu lado positivo porque te contagiarás de su alegría y positivismo. Inconscientemente, relacionarás esa sensación con ellos e imitarás su patrón de comportamiento.
  • Como ya sabemos que el cerebro no tiene la capacidad de diferenciar entre una sonrisa falsa y una genuina, te invitamos a sonreír más a menudo como un ejercicio facial, sin motivos o razones jocosas que provoquen una carcajada. Esto no solamente nos hará sentir mejor, sino que nos enseñará a ser más espontáneos a la hora de reír.
  • Por último, debes identificar las cosas que te hacen sentir bien o que te motivan a sonreír, de modo que conscientemente comiences a poner en práctica esas actividades que te son divertidas y positivas. Cuando sigas todos los pasos que mencionamos, te darás cuenta que tendrás dibujada una sonrisa en el rostro gran parte del día.
  • Coloca fotos sonrientes de tus personas más queridas en distintas partes de la casa o la oficina, de modo que sirvan de imanes y te contagien ese buen humor. También puedes llevar estas fotografías encima y colocarlas en lugares muy visibles.

 


Autor: © PSIGUIDE